No se pudo. Por más que lo intentaron, los chavalos de la Selección Nacional de Fútbol, no lograron el objetivo que se plantearon para esta Copa Centroamericana de Naciones. Nicaragua perdió 1-0 frente a El Salvador, y terminó en el quinto puesto de la clasificación general, con medio boleto, que se disputará contra Haití, en el mes de marzo.
La Selección de Nicaragua jugará el repechaje a Copa Oro contra la Selección de Haití en el mes de marzo. pic.twitter.com/ePFUzBEGvd
— UNCAF (@uncaf) 22 de enero de 2017
Fue un partido que dejó un mal sabor de boca. Los dirigidos por Duarte tuvieron, por lo menos, cinco jugadas claras de gol, que bien hubieran regalado el pase directo, sin embargo, no fueron aprovechadas. Los jugadores se pusieron nerviosos frente al marco salvadoreño, dejando en evidencia que hace falta más trabajo en la finalización de las jugadas.
El encuentro arrancó con una Nicaragua que defendió espléndido. El bloque de cuatro defensas conformado por Quijano, Téllez, Copete y Rosas, no dejaban espacio a la duda. Adelante Montiel y López fueron unos sabuesos recuperando el balón. García sacrificó sus habituales arrancadas por la banda y las cambió por apoyo defensivo. Arriba solo Barrera, Cadena y Moreno, se encargaban de generar jugadas.
El buen planteamiento de los nuestros, limitaba a los cuscatlecos a probar desde largo, sin mayores riesgos. La única jugada de verdadero peligro, fue una contra que resolvió Eric Téllez al minuto 31.
Los pinoleros siguieron en su labor defensiva y sufrían muchas faltas. El árbitro central John Pitti bien pudo sacar tarjetas amarillas en varias jugadas a los salvadoreños, pero se las guardó y así continuaría a lo largo del partido. En ocasiones hasta parecía que El Salvador jugaba con 12 y Nicaragua con 11.
Un balde con agua fría
La solidez defensiva de Nicaragua mantuvo la portería lejos de cualquier peligro. Sin embargo, en el segundo tiempo, un error en un balón filtrado, terminó con todas las aspiraciones.
El Salvador realizó un cambio, de esos que le dan la razón al técnico, y retiró a Jaime Alas, con poca efectividad ofensiva, y en su lugar ingresó Irving Herrera. Ojalá no hubiera entrado.
El capitán salvadoreño Andrés Flores observó cómo Herrera estaba con ventaja respecto a la defensa pinolera. De forma magistral filtró un pase que su compañero recibió de maravilla. Este sacó medio cuerpo a Eric Téllez y definió entre las piernas a Diedrich.
Gol, y sufrimiento para Nicaragua.
El equipo nacional intentó buscar el empate pero no pudo concretar. Primero fue Bryan quien remató solo de frente al marco, pero se fue arriba. Un centro de mucho peligro que sirvió Rosas desde la esquina, tampoco fue aprovechado por Moreno y Cadena. El tiempo se agotaba, las opciones también.
Duarte se jugó todo en los últimos minutos del segundo tiempo. Realizó tres cambios ofensivos: sacó a Montiel, Bryan y Eric Téllez, e ingresaron Norfran, Pinel y Somarriba. Toda la carne en el asador.
Nicaragua pudo empatar con tres jugadas claras, dos de ellas más peligrosas que la otra. Primero Barrera, que recibió solo en el área, mandó el balón a las nubes. Luego Copete, con un tiro libre, que igual se fue a las gradas. El de raíces colombianas, tuvo la más clara, de frente al portero salvadoreño pero con tan mala fortuna, su disparo, como el de los otros, se fue desviado.
Una a una las opciones del empate se diluyeron hasta que Pitti marcó el final del partido. Nicaragua no pudo conseguir el pase directo, ahora tendrá que enfrentar a Haití, selección que anda en muy buenas condiciones, para ir a la Copa Oro.
El destino, la casualidad, el esfuerzo y la garra, no fueron suficientes para lograr el objetivo. Sumado al pésimo arbitraje que nos recetaron en la copa.
Unos minutos después de haber finalizado el partido, Juan Barrera pidió disculpas desde su cuenta de Facebook a la afición nacional por no lograr el pase directo. Precisamente en esta red social, todos lamentaban la derrota.
Sin embargo, si alguien lee esto y tiene a Juan a su lado, dígale que no pida disculpas, que la verdadera afición nicaragüense, no tiene nada que perdonar ni reprochar, pues conocen del esfuerzo de todos los seleccionados.
“Ahora nos ven con respeto”, “Le hicieron ganas chavalos, vamos por ese pase contra Haití”, “Todos somos azul y blanco”, “Soy puro pinolero, nicaragüense por gracia de Dios”, fueron algunos de los comentarios de los seguidores nacionales. Así que Juan, no pidás disculpas, porque no sos culpable de nada. Todos en Nicaragua estamos orgullosos de vos como capitán y de los otros 22 jugadores.