Llevamos más de tres meses desde el estallido de la crisis en Nicaragua y parece que estamos lejos de volver a la normalidad. Desgraciadamente, esto está creando un daño colateral en nuestras calles, las cuales están cada vez más llenas de basura.
Si bien Nicaragua nunca ha tenido una cultura responsable en cuanto al manejo de desperdicios, la situación está escalando a una velocidad alarmante. Es verdad que tenemos muchísimas otras cosas más urgentes de qué preocuparnos. Sin embargo, el tema de la basura me duele y angustia bastante porque si sigue así pronto tendremos epidemias de salud, además de todo lo demás.
De momento, mi conciencia ecológica es solo eso. Sé que hay un problema pero no tengo ni idea de cómo solucionarlo. Así que estoy investigando e ideando formas de reducir desechos, ahorrar energía y reciclar. Espero poder compartirte mis hallazgos a medida que vaya aprendiendo.
Quise compartirte mi preocupación porque quizás vos también estés pensando en esto y quería decirte que ya somos dos. Creo que hablar al respecto es un gran primer paso para ir haciendo comunidad y sumar ideas y esfuerzos.
Después de todo, luego de esta crisis vamos a tener que reconstruir Nicaragua desde cero. Así que es la oportunidad perfecta para hacerlo de la forma correcta. En todos los sentidos.
Si te sentís identificado con el tema dejame un comentario. Tus ideas y consejos son más que bienvenidos y me darán una luz para futuros textos.
Como siempre, muchas gracias por leer y que la fuerza te acompañe. ¡Hasta la próxima!
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