Innovación

Un grupo de más de 80 jóvenes egresados del Diplomado en Liderazgo y Gerencia Política (DLGP), iniciativa creada desde el 2010 con el propósito de formar líderes, se reunieron el viernes 23 de marzo para reconocer herramientas tecnológicas que sirvan para realizar proyectos que beneficien a sus comunidades.

Estos jóvenes pertenecen a RedEs (Red de Egresados), que cuenta con más 2,300 egresados en Nicaragua pertenecientes a distintas organizaciones de la sociedad civil y partidos políticos. Julian Quibell, director del Instituto Nacional Demócrata (NDI, por sus siglas en inglés) afirmó que la diversidad es, precisamente, una de las características que unen a esta red de líderes.

“Es importante que se conecten porque juntos hacen más. Sabemos que hay una rica cultura de colaboración entre ustedes y que el consorcio ha cultivado durante muchos años, pero creemos que podemos potenciarlo más”, manifestó Quibell al público.

El evento también fue precedido por la embajadora de Estados Unidos en Nicaragua, Laura Dogu, quien manifestó en su discurso que “Nicaragua tiene la capacidad de fortalecer su democracia por jóvenes comprometidos como ustedes”.

“La semana pasada di un discurso en un evento titulado El camino a 2030 comienza hoy. En mi discurso pregunté sobre la Nicaragua que quieren ver en 2030. En mi opinión, son ustedes los jóvenes líderes, quienes deberían de dar la respuesta a esta pregunta. (…) A pesar de los obstáculos que deben enfrentar no pueden darse por vencidos en su búsqueda del bien común”, manifestó la embajadora.

Jóvenes se interesan por temas de movilización social

Ximena Castiblanco es una joven que formó parte en 2014 del DLGP. Entró al diplomado cuando era voluntaria de Misión Bosawas, una organización que aborda temas relacionados al medio ambiente.

Durante el curso, recibió diferentes módulos sobre derechos de las mujeres y de personas de la diversidad sexual, al igual que otros de incidencia política. Ximena, al ser activista medioambiental, decidió trabajar junto a otros compañeros el tema del agua, en especial el rescate a la Ley de cánones de agua, la cual manda que las grandes industrias del país paguen por el aprovechamiento de este recurso.

“Lo bonito es que esa retroalimentación que le hicimos a la propuesta logró que al año se hiciera realidad y es por eso que existe actualmente una ley de cánon de agua”, afirma Ximena Castiblanco.

Para ella, ese fue su primer espacio formal sobre activismo, donde compartió con personas de varias generaciones inquietudes sobre las distintas problemáticas medioambientales que ha sufrido Nicaragua.

Proyectos como este han surgido a lo largo de los ocho años que ha durado el Diplomado de Liderazgo y Gerencia Política.

Davis Nicaragua tiene 24 años y su proyecto de culminación del DLGP consistió en crear campañas de incidencia social en su comunidad, Ciudad Sandino. Inició desde acciones organizadas colectivamente, como exigir que las autoridades de un barrio reparen las luminarias a través de la organización y el acuerpamiento de los pobladores.

“Siempre mi interés ha sido el tema de la juventud. A lo largo de este proceso aprendí a cómo organizarse. Mi interesó el tema de la incidencia política y cómo los jóvenes que están organizados pueden incidir en su comunidad. Inicié a realizar procesos formativos desde mi estructura organizativa a jóvenes de Ciudad Sandino”, explica Davis.

Esto provocó que la comunidad donde Davis trabajó no solo tomara fuerza a través de los jóvenes, también caló hasta en los adultos. Entre sus metas futuras está el seguimiento a la campaña que ha elaborado desde que egresó del diplomado, titulada: Municipio Seguro.