Innovación
El proyecto tiene el fin de crear un lugar para las artes, las artesanías, los bordados y toda clase de productos elaborados a mano por emprendedores nicaragüenses.
Mamamía es espacio colaborativo que nació en medio de la crisis política y económica que vive Nicaragua, donde centenares de emprendimientos se han visto afectados. Pasó de ser una idea de emprendimiento liderada por tres generaciones —Magda Roiz, Ana Lucía Cantillano y Lidice Sotomayor; madre, hija y abuela— una plataforma que tiene la intención de potenciar productos hechos a mano por nicaragüenses.
Pero antes, esta generación de artesanas de tejidos comenzaron a confeccionar camisas y bolsos, y a la vez crear una plataforma donde no solo se ofrecieran los productos que ellas elaboran, sino también los de otros emprendedores que se mantienen en el mismo rubro. Esto es, en esencia, el objetivo de Mamamía, que a través de la colaboración pretenden colocar en un solo espacio y en un solo punto el trabajo de otros artesanos y productores del país.
“Emprender en medio de la crisis ha sido un reto increíble, porque todo el mundo te dice que es el peor momento para iniciar una idea de negocio. Es un gran reto porque la situación está muy difícil”, comenta Magda Roiz.
Mamamía lleva dos meses y cuenta en sus instalaciones con algunas marcas, como Hojita de Agua Dulce, Artefacto y Luna Verdad, emprendimientos de productos realizados en Nicaragua.
“La intención que tenemos es que estos emprendimientos surjan y crezcan. Nosotros estamos abriendo esa puerta para personas que estén iniciando, o que estén bien posicionados. La idea es unirnos para poder atraer a la gente y que puedan adquirir los trabajos, y también que sea un espacio para el crecimiento de los emprendimientos”, subraya Roiz. “La idea es potenciar el mercado local”.
Mamamía también quiere ofrecer un espacio cultural donde se puedan impartir talleres de arte y de otras disciplinas. Durante las últimas semanas de junio, el mes del Orgullo LGBTIQ, en Mamamía se exhibieron algunas películas relacionadas con estas temáticas. Además, se imparten clases de Yoga.
“Es un gran reto porque la situación está muy difícil. En las actuales circunstancias estamos apostando a este tipo de espacios colaborativos”, remarca la emprendedora.
Para muchos emprendedores, una crisis puede ser un aliciente para poner a prueba la reinvención y la creatividad. Desde abril la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social calcula que se han perdido más de doscientos mil empleos, raíz de la crisis política que atraviesa el país. Desde entonces, más personas ven en los emprendimientos una opción para superar el desempleo y dar un gran paso.
Algunos expertos en innovación y emprendimiento recomiendan crear productos pensando en exportarlos a otros países, con el fin de superar las barreras que puede haber en un futuro en Nicaragua. También algunos proyectos e incubadoras de ideas recomiendan pensar en emprendimientos tecnológicos que puedan ser útiles en el extranjero.
Para ser parte de estos espacios, podés escribir a la página de Facebook de Mamamía, o bien, llamar al 8894 9341.
