Música
En el caudal del que formaron "Quiéreme", "Una de dos", "Al Alba" o "No te desnudes todavía", he aquí una selección de lo más destacado del artista español
Calificado como el «Leonard Cohen» español por muchos de sus correligionarios, las canciones de Luis Eduardo Aute, fallecido este cuatro de abril, dejan una amplísima obra musical caracterizada por el alto nivel poético y lúcido de sus letras, por su sensibilidad emocional y sus eróticas imágenes extrasensoriales.
Con la difícil misión de bucear en ese caudal del que formaron parte tantas y tantas piezas destacadas como «Quiéreme», «Una de dos» o «No te desnudes todavía», he aquí una selección entre las más importantes de su obra.
Diez canciones de Luis Eduardo Aute
«Rosas en el mar»
De vuelta del servicio militar, entregó a Massiel unas canciones que había hecho «por pura curiosidad». Se trataba de este tema y de «Aleluya Nº 1». La madrileña las grabó y fueron no solo un éxito mundial, sino la constatación de que con sus canciones, Luis Eduardo Aute sabía pintar obras maestras sin pinceles.
«Las cuatro y diez»
Editada en primer lugar como parte del debut de Rosa León, fue en 1973 cuando se lanzó una de las canciones de Luis Eduardo Aute más emblemáticas tras un lustro de retiro. Relato de reencuentro con ese primer amor que no llegó a ser el último, pero que quedó como eterna posibilidad pese a la huella del tiempo.
«De alguna manera»
Otra de las que llegaron al lote de Rosa León y que para sí hubiese querido Joan Manuel Serrat, según reconoció el catalán. Depurado lamento amoroso, sobre todo en ese verso que se repite como una letanía en voz queda… «De alguna manera tendré que olvidarte».
«Al alba»
Probablemente el tema más importante entre las canciones de Luis Eduardo Aute. Su éxito fue tal que, «por reiterativo», llegó a aparcarla durante un tiempo en sus conciertos. Aute la escribió como homenaje a las últimas víctimas fusiladas por la dictadura franquista y como alegato contra la pena de muerte.
«Anda»
Del erótico álbum «Espuma» (1974) destacó esta canción en la que, en el tramo final del franquismo, apuesta casi en un susurro por una «batalla» carnal hasta proclamar: «Seamos un cuerpo enamorado».
«Pasaba por aquí»
Revitalizada varias décadas después por Pedro Guerra, se trata un corte de tintes más lúdicos con el que, a través del álbum «Alma» (1980), cerró la trilogía «Canciones de amor y de vida».
«Sin tu latido»
En pleno auge del pop ochentero, cosechó un enorme éxito comercial con el álbum «Cuerpo a cuerpo» (1984), que fue disco de oro y recogía esta canción de guitarras callejeras y trasnochadoras sobre el desgarro vital en ausencia del ser amado. Otra de las más reconocidas canciones de Luis Eduardo Aute.
«Slowly»
Arrancó la década de los 90 con un disco producido por Suso Saiz y titulado como este corte que contó con un videoclip dirigido por Azucena Rodríguez y Carmen Rosado. Por si las compañías no fuesen suficientemente buenas, Christina Rosenvinge le arropa en los coros para seducir en un baile lento.
«La belleza»
Incluido en «Segundos fuera» (1989), en ella traza un delicado fresco sobre un tiempo lastrado por el capitalismo por el que Aute rehúsa dejarse arrastrar y en el que apuesta por encontrar la esencia natural de las cosas.
«Alevosía»
En los años 90 publicó este tema que, con la colaboración de Silvio Rodríguez en los coros, es una invitación al deseo descarnado, sin escudos, «como un golpe de puñal».