La ducha es en teoría un lugar ideal para tener sexo, especialmente en estos días de calor intenso. Ya estamos desnudos, mojados y limpios, especialmente importante para los que no disfrutan de los olores y sabores naturales, para los que tienen una pareja (del momento o estable) digámoslo así, laxa con la higiene personal o para los que prefieren lavarse antes de “volver a ensuciarse”.
También es maravillosa para salir de la rutina de siempre hacerlo en la cama. Sin embargo, para salir de la rutina, hay que salir completamente, porque no funciona igual hacer lo mismo que hacemos en la cama, en la ducha. Si pretendemos hacer lo mismo, entonces que aburrido, mejor nos quedamos en la comodidad de la cama. Si nos abrimos a las posibilidades que nos da el agua, los cuerpos jabonosos, puede ser una experiencia increíblemente sensual.
Además, podemos aprovechar para que nos dejen bien limpios. Te pueden exfoliar la espalda y en el caso que tengas un marido que es de esos hombres que piensan que las piernas se lavan sólo con la espuma del jabón que cae cuando se desaguan el resto del cuerpo (no es broma, ni poco común), es buena oportunidad para prestarle atención a la higiene de esa parte de sus cuerpos.
En lo personal, mi mayor miedo es que alguien se resbale y terminar con una situación dolorosa y/o sangrienta. Por eso me he alegrado sobremanera de encontrar una tienda en línea que vende todo tipo de “suplementos” para hacer del sexo en la ducha no sólo más ameno e innovador, sino además, seguro. Les comparto la dirección http://extasia.es/84-sex-in-the-shower.
Como siempre en el sexo, no todo es compartido. La ducha también es un buen lugar para tener sexo en solitario. En el caso de las mujeres, 2% de ellas tienen como técnica preferida de masturbación estimular su clítoris empleando el chorro de agua de la manguera en la ducha o en la bañera. De igual manera, muchos hombres se masturban en la ducha. Si pienso en ello, lo primero que se me viene a la mente es aquella escena donde Kevin Spacey, en American Beuty, explica que el mejor momento de su día es cuando se masturba mientras se baña.
Eso sí, hay que tomar en cuenta que no es una práctica muy ecológica, así que hay que dejarla para de vez en cuando.