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¿Por qué Australia está siendo devorada por las llamas? 

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Un rescatista australiano salva a un koala de las llamas. David Mariuz | EFE

Al menos cuatro millones de hectáreas han sido consumidas por las llamas que alcanzan los setenta metros de altura en casi toda Australia. Desde hace varios días miles de bomberos y soldados luchan por evitar la propagación del fuego, pero se enfrentan a una catástrofe fuera de lo común. Los incendios en las temporadas secas australianas son comunes, pero la voracidad de estos últimos no tiene comparación. Y todo parece indicar que la subida de las temperaturas y el cambio climático empeora el panorama.

¿Cómo se originaron los incendios? 

Desde septiembre de 2019 se registran fuegos inusuales en la región australiana producto de las altas temperaturas y pocas lluvias. Durante ese año se registraron subidas históricas que alcanzaron los 41 grados Celsius. Australia también es uno de los mayores emisores de dióxido de carbono, lo que abona al efecto invernadero y afecta a su vez al cambio climático. 

Los cambios globales de temperatura pueden ser uno de los factores principales de esta catástrofe.  

Otra razón es un fenómeno natural conocido como dipolo del Océano Índico, o Niño Indio, que en pocas palabras sumerge a la región en periodos de sequías y altas temperaturas.  

¿Qué tan feroces son las llamas? 

Algunos especialistas calculan que, desde septiembre hasta ahora, se han quemado entre cuatro a seis millones de hectáreas. Para ponerlo en perspectiva, los incendios del año pasado en la Amazonia devoraron 900 mil hectáreas. Una hectárea es más o menos el tamaño de un campo de fútbol. 

El humo de los incendios envuelve todo Sidney, una de las ciudades más importantes de Australia. Bianca De Marchi | EFE

Otros análisis arrojan que las llamas alcanzan los 70 metros de alto, casi la altura de la Casa de la Ópera de Sidney. Esto ha provocado que en algunas localidades, el cielo se tiña de rojo y la calidad del aire llegue a niveles más elevados que ciudades como Beijing, consideradas como una de las urbes con más polución en el mundo.  

Entre las zonas de emergencia se encuentra Nueva Gales del Sur, donde se han registrado 19 de los 25 muertos producto de los incendios. Se reportan también tres bomberos fallecidos y unos 2700 luchando contra el fuego. 

Lo que está en juego 

Los incendios ponen en riesgo comunidades humanas y silvestres. Al menos 500 millones de animales están en serio peligro de muerte, según catedráticos de la Universidad de Sidney. Entre los más afectados se encuentran los koalas, animales silenciosos y de movilidad lenta. Igual los canguros, solo que ellos tienen mayor probabilidad de sobrevivir debido a su rápida movilidad. Lo que sí podrían perder para siempre es su hábitat. Miles de animales que están en los albergues perdieron sus hogares.

En Victoria, el gobierno estatal cifró en 200 las casas destruidas por las llamas este fin de semana, la mayoría de ellas en el municipio de East Gippsland, que incluye la localidad de Mallacoota, donde el humo impidió la evacuación por vía aérea de unas 300 personas cercadas desde hace días. 

La Universidad de Sidney asegura que miles de especies corren peligro por los incendios. David Mariuz | EFE.

El humo también afecta a varias ciudades como Melbourne o Camberra, afectadas por la mala visibilidad y una pobre calidad del aire que han obligado a la capital australiana a cerrar las guarderías. También la preocupación ha aumentado debido a que este fin de semana se reportaron dos personas desaparecidas.  

El “respiro” de la lluvia 

Este lunes, una leve lluvia en las zonas afectadas permitió que muchos focos no se siguieran propagando. No obstante, se espera que las temperaturas vuelvan a rondar los 40 grados a finales de esta semana.  

La Oficina Meteorológica de Australia indicó que la jornada será dominada por la nubosidad y algunas lluvias en el sur del estado de Nueva Gales del Sur, la zona más afectada por los fuegos, así como en Victoria. 

La respuesta del Gobierno 

Tras semanas de inconformidad ante lo que muchos australianos consideran como una respuesta tardía del primer ministro Scott Morrison, el Gobierno central prepara ayudas millonarias para combatir el fuego y reparar los daños. 

Soldados y bomberos se despliegan para controlar las llamas. Helen Frank | EFE

Según declaraciones de las autoridades, se destinará 1388 millones de dólares para la recuperación de las zonas afectadas por los incendios forestales. 

“Se hará lo que haga falta, cueste lo que cueste”, dijo Morrison en una rueda de prensa en Camberra tras reunirse con el comité de seguridad nacional de su gabinete para analizar la respuesta a los incendios. 

El dirigente señaló que la partida presupuestaria es independiente de otras ayudas ya aprobadas y aclaró que se trata de un compromiso «inicial» que podrá incrementarse si es necesario y aumentan los daños. 

«Nos centramos en el coste humano y el coste de reconstrucción de las vidas de la gente (…) para garantizar que hacemos todo lo posible, tan rápido como podemos, para ayudar a los esfuerzos de recuperación», añadió. 

La medida sigue a la del despliegue de tres mil reservistas y una partida de 13,8 millones de dólares para alquilar cuatro hidroaviones y otros medios aéreos que el primer ministro anunció el sábado, al final de una de las peores jornadas en esta oleada de incendios. 

Con información de EFE.