Sony y Marvel Studios (este último adquirido por Disney) recientemente pusieron fin a la discusión que había dejado en el limbo la posibilidad de ver a Spider-Man en el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM). Con el acuerdo, se confirma el estreno de una tercera película de este personaje protagonizada por Tom Holland y producida por Kevin Feige, que saldrá a la pantalla grande en el 2021.
Mucha polémica gira alrededor de este personaje, quien tiene el superpoder de escalar paredes, columpiarse entre edificios con sus telarañas y hasta diez veces la fuerza de un humano promedio. El problema con él, es que los derechos para llevarlo al cine no son propiedad de Marvel Studios, sino de Sony Pictures.
Pero, ¿Cómo sucedió esto?: Según el sitio Hipertextual 1960 y 1970 fueron los “años maravillosos” para Marvel Comics, la empresa que comenzó a comercializar las historietas con los superhéroes creados principalmente por Stan Lee. Sin embargo, en los años noventa con la entrada de Ron Perelman como accionista, muchas variables —principalmente el excesivo costo de los comics— llevaron casi a la quiebra a la compañía, que tuvo que vender los derechos de los superhéroes a terceros.
Sony Pictures hizo varias películas por su cuenta, pero ninguna con tanto éxito como el que han tenido los filmes del UCM. Mientras esperás cómo Kevin Feige resuelve la historia del Spider-Man de Tom Holland, poné a prueba tus conocimientos del hombre araña.