Estilo
Cada vez más mujeres son víctimas de robo, acoso, violaciones y hasta femicidios al movilizarse en buses y taxis. ¿Por qué el Estado no reacciona y qué medidas de prevención podés tomar?
María Gabriela tiene miedo de salir de su casa. Está convencida que afuera reina la inseguridad, sobre todo para las mujeres. Hace unas semanas cuando viajaba a bordo de un taxi, por los semáforos de Jardines de Veracruz, un hombre abrió la puerta, se montó y la amenazó con una navaja. Ella le suplicó que no le hiciera nada y él comenzó a decirle obscenidades y a manosear su cuerpo.
Minutos después el tipo le ordenó al taxista que se detuviera en el supermercado que está ubicado en Rubenia, pero el conductor a como pudo intervino y logró quitarle la navaja. Él hombre aprovechó el forcejeo para salir corriendo. María Gabriela estaba desconcertada.
“El taxista me vino a dejar hasta la puerta de mi casa y esperó que entrara. Me dijo que mejor terminaría el turno, pues las cosas estaban feas últimamente y que mejor no saliera sola. Si no me hubiera ayudado quien sabe cuál sería la historia”, cuenta.
Dos días después un motorizado intentó tocarle el trasero cuando caminaba hacia su casa luego de dejar a su hija en el colegio. “Yo ya no camino tranquila. Hasta miedo me da ir y venir a la venta. Me siento molesta y nerviosa, desde el domingo (dos de febrero) ando mal de los nervios y ahora esto”, se lamenta.
Los casos de denuncias sobre violencia hacia las mujeres en calles, taxis y buses han aumentado en las últimas semanas. El 25 de enero pasado, la adolescente de 17 años, Joseling Pineda, fue asesinada por un taxista cuando se trasladaba de su casa ubicada en Chichigalpa, Chinandega, a un centro de estudios ubicado en ese departamento. Ella salió de su casa a las seis de la mañana porque iba a matricularse en una carrera técnica, pero su cuerpo apreció hasta en la noche. Según informó la Policía Nacional, el conductor del taxi, identificado como José Ocampo, la mató por robarle un celular.
Para la experta en temas de seguridad ciudadana, Elvira Cuadra, el Estado es responsable de brindar seguridad a todas las personas que usan este y otros servicios de transporte. Y también, señala que esta es una responsabilidad compartida con las compañías o empresas de taxis.
“Los servicios de taxi son parte del sistema de transporte público de un país, en ese sentido son objeto de supervisión y control de parte del Estado; y además de supervisar el estado de los vehículos y la calidad del servicio, deben supervisar la seguridad de los pasajeros o usuarios”, dice.
La feminista María Teresa Blandón explica que aunque la violencia hacia las mujeres siempre ha existido, actualmente en Nicaragua hay un ambiente que propicia impunidad para los agresores.
“Después de casi dos años de violencia estatal, incremento de hombres armados en las calles, delincuencia común y de un descuido en las instituciones, pues es evidente que los agresores tienen condiciones favorables para salir ilesos de esos actos de violencia (…) La Policía no está recibiendo denuncias, (y si lo hace) no las tramita, las desestima y, a pesar que hay casi 17 000 miembros en esta institución están ocupados en otras cosas”, señala Blandón.
Mujeres en estado de indefensión
Celeste es otra joven que sufrió violencia sexual en días recientes. Cuando se trasladaba en la ruta 102 un hombre se situó detrás suyo y la comenzó a manosear con disimulo. Ella al percatarse, se movió; él la siguió y volvió a ponerse detrás.
“Del nervio no me había fijado que ya habían asientos libres en el bus, así que me fui a sentar y el tipo me siguió y se sentó detrás de mí. Yo me puse más nerviosa y en cada paraba lo miraba disimuladamente para ver si se bajaba. Cuando ya me tocaba bajarme del bus corrí hacia la puerta delantera porque vi que iban dos hombres y dije ‘si este se baja, le digo a uno de ellos’”, narra.
Al ver la reacción de Celeste, el hombre trató de pararse para bajarse, pero al hacer contacto visual con ella volvió a sentarse. “Yo me bajé temblando. Enojada conmigo por sentir miedo, por no andar nada con qué defenderme. He vuelto a usar esa ruta, pero ahora estoy más pendiente de a quién tengo al lado y decidí andar algo con que defenderme”, relata.
- Te puede interesar: Aventón: Pedí un taxi desde tu celular
- Apps para pedir un taxi: los Uber nicas
Cada vez son más las mujeres que están optando por tomar medidas de seguridad y de defensa para movilizarse, pues se sienten inseguras. Algunas de las opciones que han tomado son usar artículos de defensa personal como taser (un artefacto de choques eléctricos), gases pimientas, usar aplicaciones de transporte como Ray y Aventón, y también transportarse en “taxis de confianza”, aunque estas últimas opciones cobren una tarifa más elevada. Asimismo, han optado por no viajar solas.
A esto se suma que la institución que debería garantizar la seguridad, no cumple con su misión y tampoco está en condiciones de responder. “La Policía en los últimos dos años ha sido la más denunciada en cometer delitos en contra de los ciudadanos y delitos en contra de las mujeres. Y para que las mujeres y los ciudadanos en general podamos ser tratados con dignidad, respeto y apego a los derechos humanos tenemos que cambiar a esa Policía Nacional. Por eso, estamos indefensión y no puede ser de otra manera”, sentencia.
¿Qué medidas podés tomar si vas a transportarte en taxi?
Aunque las medidas de seguridad varían según cada persona, te compartimos algunos consejos en general que te pueden ser de ayuda:
- Asegúrate que el taxi circule con la torre blanca o amarilla y tenga las franjas de los lados.
- Anotá el número placa y mándalo a alguien de confianza. Si tenés internet envía tu ubicación en tiempo real para que tu familiar o amigo sepa por dónde vas.
- No te subás a taxis con vidrios polarizados.
- Fíjate en la vestimenta del conductor.
- De preferencia siéntate en la parte de atrás, al lado contrario del asiento del conductor. Así podrás salir con más facilidad si él trata de retenerte.
- Ve siempre alerta. No te distraigas con el celular.
- Si el taxi va en movimiento es recomendable que le pongas seguro a la puerta, pues alguien podría subirse en algún semáforo.
- Confía en tus instintos. Si ves algo sospechoso no dudes en pedirle que se detenga.
- Algunos teléfonos tienen la opción número de emergencia que se activa con una combinación de botones. En el caso del Iphone buscá en configuraciones “Emergencia SOS” y configúralo. Para Samsung apretá el botón de encendido durante unos segundos, seleccioná modo de emergencia y actívalo.
- Si puedes tomar algún taxi de confianza o aplicación de taxis hazlo.
