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Diario Libre Digital es la nueva iniciativa que periodistas nicaragüenses impulsan para seguir haciendo periodismo tras el cierre de El Nuevo Diario
Trabajan remoto, algunos están en Managua y otros en sus departamentos; hay unos que trabajan desde sus computadoras y otros solamente cuentan con sus teléfonos celulares. Con pocos recursos, pero sobrado entusiasmo, periodistas del extinto El Nuevo Diario (END), clausurado en septiembre de 2019, se dedican a reportar día a día las noticias de Nicaragua, bajo el nombre de Diario Libre Digital.
«Cuando El Nuevo Diario oficializó su salida de circulación, al colectivo de reporteros nos sorprendió porque, si bien sabíamos que la cosa con el material –papel, tinta y planchas retenidos– se terminaba, nunca esperamos que también se interrumpiera la versión web del diario«, recuerda Humberto Galo Romero, periodista de El Nuevo Diario y ahora uno de los fundadores de Diario Libre Digital.
Ese día 27 de septiembre de 2019 significó mucho para el periodismo nicaragüense, sobre todo, para los periodistas que se quedaban sin empleo, sin una fuente de ingreso. Pero «al darse el cierre inesperado de El Nuevo Diario, sabíamos que nuestra vocación como periodistas no podía ni debía morir», añade Letzira Sevilla, otra de las fundadoras de este nuevo medio.
Un Diario Libre de ataduras
«Cuando buscábamos el nombre del medio, queríamos algo que nos identificara ante los lectores y que representara lo estábamos buscando. Escogimos Diario Libre porque es un deseo que actualmente, más que nunca, tiene la sociedad nicaragüense. El nombre define nuestra visión de trabajo», expresa Daniel Santos Matute, otro de los miembros de Diario Libre, quien también fue el encargado de subir a la web la última edición impresa de El Nuevo Diario.
Este es un Diario Libre, «porque condensa nuestra idea de hacer un periodismo libre de ataduras que llevan muchas veces a la autocensura», comenta Sevilla. Y porque aquí «planeamos cubrir temas de interés nacional, pero nuestro proyecto va dirigido a contar las historias de los municipios y los departamentos, sabemos que hay mucho para contar lejos de Managua», agrega Santos.
El sitio oficialmente se llama Diario Libre Digital de Nicaragua, y ya tiene definida su estructura en secciones como, coyuntura, sucesos, deportes, cultura y espectáculos. En este sitio, queremos también desarrollar temas a profundidad en ejes temáticos como medioambiente, derechos humanos, equidad de género y juventud«, comenta Galo.
Muchos se solidarizaron
Según Santos, el día que cerró el Nuevo Diario y ellos se quedaron sin empleo, «muchos colegas y lectores se solidarizaron con nosotros los periodistas. Ahora que estamos emprendiendo esperamos que nos lean. Este contenido es gratuito para que compartan y que nos sigan por nuestras redes sociales. Nos gustaría que ese mismo apoyo se demuestre a estos cinco periodistas soñadores».
De hecho, una de las razones por las cuales el Diario Libre Digital pudo salir a la luz, fue la solidaridad, pues el día del cierre de El Nuevo Diario, Manuel Díaz, creador de Bacanalnica y experto en redes sociales y web, ofreció a los periodistas despedidos un espacio digital para que siguieran haciendo periodismo.
«El mismo día del cierre de El Nuevo Diario, Manuel nos ofreció sus servicios si queríamos seguir trabajando a partir de un medio completamente digital. Ese día Letzira me comentó que le tomaría la palabra a Manuel y me dijo que si quería formar parte del equipo, en ese momento no lo pensé mucho y le dije que sí», recuerda Santos.
Letzira entonces, al ver el artículo que publicó Díaz en su portal Bacanalnica, aún en las instalaciones de El Nuevo Diario, le escribió y expresó el interés de tomarle la palabra. «Asimismo, mi colega Humberto Galo también lo contactó y luego ya formamos el grupo», dice Letzira.
Periodista de El Nuevo Diario, aquí podes construir tu nueva casa, gratis (donde come un nica, comen veinte) https://t.co/fXtyX6wcNs
— Bacanalnica.com (@Bacanalnica) September 27, 2019
La invitación sigue abierta
La oferta fue que hizo Manuel Díaz se hizo realidad el pasado tres de febrero de 2020. «Lo que yo hice fue darles ese apoyo técnico. Fue una cuestión instintiva, no me puse a pensar ni a reflexionar en lo que conllevaba. Lo único que hice fue ofrecer otro vehículo digital para que lo hagás», dice Díaz. Y así se hizo.
Según el creador de Bacanalnica no solamente los periodistas que quedaron sin empleo a partir del cierre de El Nuevo Diario, sino que se acercaron como cinco medios digitales más, buscando su asesoría, la cual, ,comenta lo hace gratis para quienes no tienen la capacidad de pagarlo.
«Todo lo que conllevó este sitio lo pensamos muy bien, porque implica un compromiso serio para llevar a los nicaragüenses una opción informativa variada y de calidad. Demanda un trabajo constante sin ningún tipo de remuneración más que la satisfacción de seguir ejerciendo la profesión pese a la censura impuesta por el régimen», asegura Sevilla.
Y fue difícil, afirma Díaz, porque la mayoría de los periodistas de El Nuevo Diario «no tenían acceso al sitio, estaban aislados, no sabían como funcionaba y era algo que estaba a cargo del equipo técnico. Por eso es que los periodistas hasta ahora están aprendiendo. Cuando El Nuevo Diario era el sitio más visitado de Nicaragua, porque lo fue, pero los periodistas no sabían cómo», comenta.
«Por mi parte me doy por satisfecho con el arranque. Y sentiré alegría si ellos dentro de seis meses están en capacidad de hacer lo mismo que hacían desde El Nuevo Diario. Que la única diferencia sea que no hay nadie que les está pagando, pero que son ellos los dueños. Y reitero que la invitación sigue abierta a quienes quieran seguir haciendo periodismo desde internet», menciona Manuel.
