Cultura

Kenshin Himura, el samurái de pelo rojo y una X en la cara que conociste a finales de los 90 en la serie Samurái X, se inspiró en realidad en un letal samurái al que le apodaban “el destajador”. Así como él, en otras series japonesas hay tramas camufladas que van más allá del entretenimiento. Por eso en Niú te presentamos un recuento de algunos animes que retratan la vida de personajes o periodos importantes de la historia, que en su momento contribuyeron a crear guerras o incluso a desaparecer imperios:

Samurái X

La serie animada se estrenó en Japón el 10 de enero de 1996, y cuenta con 95 episodios. Samurái X narra la historia de Himura Kenshin, un samurái que decide retirarse y comienza a utilizar sus habilidades con la espada para proteger a personas inocentes, pues se siente culpable por todas las personas que asesinó en su pasado como espadachín.

Samurái X es una historia inspirada en la vida de Kawakami Gensai “el destajador”,  uno de los cuatro samuráis más poderosos de la era Bakumatsu de Japón, que comprende desde el año 1853 hasta 1868. Luchaba contra el régimen militar Tokugawa y apoyó  al  Emperador Meiji en su búsqueda del poder.

Kawakami Gensai era un asesino de élite que se caracterizaba por ser sereno y calculador en momentos de tensión. De rasgos finos, tanto que podría confundirse con una mujer. Tenía una técnica caracterizada por su “endiablada velocidad”.

Gein, uno de los villanos de la serie fue basado en Edward Theodore Gein un asesino estadounidense célebre por sus atroces crímines. Hanibal Lecter y otros thrillers también están inspirados en él.

Hetalia Axis Powers

Hidekaz Himaruya ideó una serie para burlarse del papel que jugó Italia en la Segunda Guerra Mundial. El nombre del anime Hetalia es una unión entre Hetare, que significa en japonés “inútil”, e Italia. Para los creadores de este anime Italia era cobarde en todas sus peleas durante el conflicto.

El anime está creado a partir de un manga y es una serie de 52 episodios en la que se dibujaron personajes que representan a los países involucrados en la Segunda Guerra Mundial. Así con las características de cada sujeto se satiriza a la nación.  Por ejemplo, Feliciano Vargas, representa a Italia. Él es el protagonista, tiene 20 años y nació el día de la formación del Reino de Italia. Es un joven extrovertido, pero con poca fuerza y además cobarde. Utiliza un uniforme escolar de marinero, con un cartel en el pecho que resalta el número uno, pero siempre necesita de Ludwig (Alemania) para resolver sus problemas.

Ludwing, mide 1.80 metros, es decidido, engreído y bastante serio, casi nunca comete errores, pero en ocasiones dice no compartir los puntos de vista de su jefe loco, con el que se quiere hacer alusión a Adolf Hitler.

A Ludwing le cuesta entablar relaciones y el único amigo que tiene es Feliciano (Italia) porque aunque comparte bastante tiempo con Kiku Honda, que representa a Japón, nunca le entrega su confianza.

Kiku Honda es introvertido, bastante serio y distante. Es muy inteligente  y tiene problemas para relacionarse con los demás jóvenes occidentales.

También se ironiza a Estados Unidos. Para él dibujaron a Alfred F. Jones, un joven de lentes, extrovertido, pero casi siempre con ideas tontas que meten en problemas a los demás. Alfred está obsesionado todo el tiempo con ser el héroe de las batallas.

Rusia no está fuera de la sátira. Para este país se creó a Iván Braginski, un tipo de carácter complicado, con traumas de infancia. Él infunde miedo a los demás porque lo catalogan de cruel y sádico.

Hadashi no Gen

Este es un anime basado en el manga creado por Keiji Nakazawa.  En 1983 se lanzó la animación como una película de dos partes, tituladas Barefoot Gen y Barefoot Gen 2 respectivamente.

Está basado en la historia de su creador, quien vivió en el contexto de la bomba atómica lanzada en Hiroshima. Las películas cuentan su experiencia como estudiante de primaria que tuvo que sobrevivir a los estragos de las bombas y que debía aguantar las burlas y desprecio de los demás porque su padre era pacifista.

La tumba de las luciérnagas

Esta es otra animación triste basada también en hechos reales. La tumba de las luciérnagas se creó a partir de la novela de Akiyuki Nosaka, un escritor japonés que relata sus vivencias durante la Segunda Guerra Mundial.

Cuando Akiyuki Nosaka vivía con su familia adoptiva en la ciudad de Kōbe, su madre murió por los bombardeos de EE.UU. Siendo un niño tiene que hacerse cargo de su hermana, a quien a pesar de todos los cuidados también muere.

El anime hace un llamado a la paz, incluso los críticos estadounidenses escribieron que es una película para las personas que no creen que el cine de animación pueda contar historias serias y profundas. Un anime que posiblemente te haga llorar.