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Jóvenes marcharon para exigir justicia para los estudiantes asesinados durante las protestas y piden libertad para los detenidos
Cientos de personas, en su mayoría jóvenes estudiantes, marcharon este lunes en Managua, en el Día Nacional del Estudiante, para exigir justicia para los compañeros asesinados durante las protestas que iniciaron el pasado 18 de abril y para demandar el fin de la persecución así como las detenciones arbitrarias.
La masiva marcha inició en la rotonda Jean Paul Genie y culminó en la rotonda Rubén Darío, inició con un minuto de silencio para recordar la masacre estudiantil de 1959, cuando una represión del presidente Luis Somoza dejó cuatro universitarios muertos, pero también a los jóvenes asesinados durante los tres meses de protestas.
«Esta vez Daniel Ortega ha asesinado a muchos de nuestros compañeros», gritaban los manifestantes. «Somos estudiantes, no somos terroristas», coreaban.
La marcha no culminó en la Universidad Centroamerican (UCA), como estaba previsto, debido a la presencia de decenas de policías en ese sector.
La mayoría de los estudiantes portaban banderas azul y blanco, otros mostraban carteles, mochilas, libros para demostrar que son sus «únicas armas» contra los ataques.
A pesar del temor que existe por la represión que ha sembrado el Gobierno de Daniel Ortega, muchos de los asistentes que estuvieron atrincherados en las universidades volvieron a las calles. En el recorrido fue común ver a jóvenes abrazarse y llorar al volver a verse tras ser desalojados a la fuerza de las universidades.
La marcha fue un acto de solidaridad con los universitarios que se atrincheraron en diferentes universidades de Managua, especialmente los de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN- Managua), quienes fueron víctimas de un ataque que duró más de 15 horas y que dejó dos fallecidos.
Los universitarios iniciaron el pasado 18 de abril las protestas por unas reformas al sistema de Seguridad Social, han sido claves en la lucha para exigir un cambio del sistema político del país.
Los universitarios exigieron al Gobierno de Ortega la liberación inmediata de los detenidos por participar en las protestas. «Queremos que pare ya la persecución en nuestras casas, por eso decimos que no podemos volver a clases mientras sigan reprimiendo y asesinando a nuestros compañeros», declaró uno de los jóvenes con su rostro cubierto.
“Queremos que liberen a nuestros compañeros porque protestar no es un delito y no podemos volver a clases mientras siga la represión, estamos en paro estudiantil y seguiremos en las calles hasta que Daniel Ortega nos deje vivir en paz», aseguró una estudiante de secundaria.
