Perfiles
Conversamos con algunos de los movimientos estudiantiles de Nicaragua, para que nos explicaran sus ideales y cuáles son sus propuestas para el futuro
Cuando la mayoría de los estudiantes que hoy luchan contra el régimen orteguista estaban naciendo, Daniel Ortega ya había sido y dejado de ser presidente de Nicaragua. En 2006, cuando volvió al cargo, la mayoría de estos jóvenes no había terminado el sexto grado. Ahora son parte de la generación que despertó a un país entero. Después del 18 de abril, en Nicaragua han nacido muchas agrupaciones que se han organizado debido a la coyuntura del país. Son autónomas, independientes y con distintos ideales. En algo sí coinciden: desean combatir «la dictadura y corrupción en todos los ámbitos».
Algunas forman parte de la Coalición Universitaria, que reúne a los principales movimientos estudiantiles de cara al Diálogo Nacional, pero como grupos toman sus decisiones de forma independiente.
Luchan por la autonomía universitaria, democratización dentro de los recintos, justicia para los caídos, mejoras al sistema educativo. Nacieron en los noventa y su filosofía es exigir cambios de una forma pacífica. Conversamos con los representantes de algunos de estos movimientos. Estos son sus objetivos y sus propuestas para el futuro:
Movimiento Estudiantil 19 de Abril
Según Edwin Carcache, el Movimiento Estudiantil 19 de abril (ME19) se fundó en la Universidad Politécnica de Nicaragua (UPOLI), con los jóvenes atrincherados desde el 19 de abril. La idea de tener un grupo organizado surge de la necesidad de denunciar públicamente los abusos que sufrían por parte de la Policía Nacional y las turbas.
Entre sus ideales están honrar la memoria de las más de 100 personas asesinadas en el contexto de las protestas y buscar la democratización de Nicaragua. Una de sus metas es ver a una Nicaragua libre, justa y democrática.
Los jóvenes que conforman la agrupación, según Carcache, son estudiantes universitarios y de secundaria, exalumnos y ciudadanos en general. «Todos hemos luchado desde el principio», afirma el representante.
Si bien, antes estaban asociados con el Movimiento Universitario 19 de Abril, por diferencias internas decidieron separarse. En la mesa del Diálogo Nacional, es Jeancarlo Manuel López el encargado de representar las necesidades y denuncias del ME19.
Movimiento Universitario 19 de abril
El Movimiento Universitario 19 de Abril nace de la pregunta «¿Qué queremos hacer, además de defender nuestros recintos?», afirma la representante estudiantil Valeska Valle. A partir de eso se unieron jóvenes de distintas universidades para juntar ideas de cuáles eran las necesidades de los estudiantes nicaragüenses. El 21 de abril, después de un consenso, se presentaron en la UPOLI.
La primera vez que se encontraron fue el 20 de abril, dentro de la UNI. Ese día más de 500 jóvenes fueron atacados por turbas y antimotines. Varios se refugiaron en un local cerca del recinto y discutieron qué era lo que necesitaban los estudiantes. Antes ninguno se conocía. «Era una propuesta de carácter urgente», expresa Valle. Deseaban darle una voz a los estudiantes para evitar a «oportunistas que se aprovecharan de la situación».
Entre todos votaron sobre quiénes serían los primeros voceros. «Todo fue consensuado entre los atrincherados. No sabíamos lo que iba a provocar nuestra primera proclama», cuenta la estudiante.
El sentimiento que más los mueve es la justicia. «Peleamos para que la muerte de nuestros hermanos no quede impune. Ninguno de esos chavalos pensaba que nos iban a atacar con tanto odio. Entonces no podemos pelear por algo, sin pedir justicia», expresa. Además, exigen la renuncia de Daniel Ortega y «un verdadero sentimiento de paz» en Nicaragua.
Dentro del Diálogo, el representante del movimiento es Víctor Cuadras, que se ha destacado por sus participaciones. El Movimiento exige que no sigan los ataques y amenazas contra sus miembros.
Coordinadora Universitaria por la Democracia y la Justicia
La Coordinadora Universitaria no estaba destinada a ser un movimiento, sino más bien un espacio para que pequeñas células universitarias se agruparan y organizaran. «Los jóvenes se organizaron cada quién en sus universidades. La mayoría de jóvenes escogieron a sus representantes de una forma democrática, por carrera. Algunos llegaron por su cuenta, porque en sus facultades no escogieron a nadie. De ahí salieron todos», cuenta Fátima Villalta, miembro de la Coordinadora.
La mayoría de mesas de trabajo estudiantiles se encontraron en una entrevista televisada y decidieron que «tenían que unir fuerzas» y consensuar ideales, explica Enrieth Martínez, vocera de la Coordinadora por parte de la Universidad Centroamericana. Días después anunciaron su creación.
Este grupo, explican sus representantes, desea ser la voz que transmite el clamor de los jóvenes. Sus objetivos son conseguir la autonomía universitaria en todos los recintos y la salida de UNEN. «Entendemos que esto es por la lucha contra la dictadura, pero también la lucha por la democratización y autonomía de nuestros recintos y de nuestros colectivos estudiantiles», comenta Villalta.
Tienen como valores la transparencia, la democracia, el pluralismo, la autonomía y la representatividad. Desean extenderse a largo plazo, pero no saben qué pasará en el futuro debido a este contexto incierto. Eso sí, plantean la eliminación del liderazgo vertical por un sistema más inclusivo y progresista.
En la mesa de diálogo su representante Francisco Martínez, estudiante de la UNAN León. Sin embargo, entre sus rostros más conocidos están también Madelaine Caracas, estudiante de la UCA y Yaritza Mairena, de la UNAN Managua.
Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN)
La Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN) empezó el 20 de abril dentro de la Catedral de Managua. Fue ahí donde muchos miembros de la organización se conocieron y empezaron a formular un movimiento que denunciara los abusos del Gobierno, desde una voz joven con la que se sintieran identificados, cuenta, Fernando Sánchez, representante del movimiento.
Dentro de AUN, se encuentran miembros de distintas universidades, para entender mejor las necesidades que tienen todos los estudiantes a nivel nacional. «No solo somos dos o tres», dice Sánchez. Explica que hay muchos rostros anónimos que han aportado al funcionamiento del grupo. «Hay gente en cultura, gente dando la cara, gente detrás de los discursos. Somos un todo», dice.
«Somos una gran familia», explica Sánchez. Insiste que dentro de AUN los procesos son democráticos y se trata de consultar a la mayoría de estudiantes que pueden. Entre sus metas están la autonomía universitaria y mayor representación estudiantil. «Queremos una reestructuración o una desintegración de UNEN, según el caso, porque pues cada universidad es distinta y no podemos aplicar algo único a todas», afirma.
El rostro más conocido de la agrupación es Lesther Alemán, estudiante de la Universidad Centroamericana. Alemán es la representación de AUN en el Diálogo Nacional. Otro de sus objetivos es crear un ambiente donde los líderes sean temporales y exista democratización en todos los planos.
Delegación de la Universidad Nacional Agraria
Los jóvenes organizados en la Universidad Nacional Agraria (UNA) son un poco más herméticos. Niú solicitó una entrevista con sus dirigentes que no ha podido concretarse. La UNA tiene un representante en la mesa del Diálogo Nacional y también su movimiento forma parte de la Coalición Universitaria.